Chillkatufe

Mi lema desde hoy!!
¿No les ha pasado alguna vez que sienten que tal vez no tomaron la decisión correcta?, bueno, eso es lo que pasa últimamente. Mi adolescente de 19 años, creyó que las relaciones públicas era la carrera ideal para ella; no tenía mucha matemática, pero si mucha lectura, por ello se ilusionó en su primer año de carrera, y creyó que, al titularse, le lloverían las ofertas de trabajo.

Sin embargo, todas esas ilusiones quedaron en nada, al igual que la cantidad de CV (curriculum vitae) que envié al terminar la carrera y que nunca tuve respuesta. Y no es que no la haya intentado, postule a diversos trabajos, desde vendedora hasta secretaria, pero siempre recibía la misma respuesta que empecé a creer que se pasaban entre ellos, me faltaba experiencia o estaba muy sobrecalificada para el cargo (cosa que no creía posible, ya que tenía escasa experiencia laboral).

No voy a negar que me empecé a desesperar, pero un día los astros se pusieron a mi favor y encontré trabajo como Asistente de Redes sociales. Ahora pensarán que es eso, bueno es un cargo donde te dedicas ayudar a los Communiy manager a encontrar información para sus publicaciones o influencers, a eso se suma el ingreso de boletas para los pagos de las empresas que requieran el servicio. La verdad no era mal trabajo, pero tampoco me sentía satisfecha, yo necesitaba algo más, ser parte de quienes generan esa comunicación, y aunque era un buen lugar para trabajar, decidí maduramente creer en todas esas frases que te dicen que si no eres feliz que renuncies y busques algo más…. Lo hice y no me fue muy bien.

Estuve gran parte del 2018 sin trabajo, hasta que un día recibí la tan esperada llamada, había encontrado trabajo al fin, el pero, no era como  relacionadora pública. Estuve a punto de rechazarlo, pero recordé que gracias a los increíbles políticos de Chile (claramente es una ironía) estaba endeudada con un maravilloso préstamo llamado CAE y el cual pagaban mis papas. No me quedo otra que aceptar, y aunque al principio fue difícil, creo que a medida que va pasando el tiempo voy aprendiendo algo nuevo. Seré sincera, no es trabajo de mis sueños y tengo días buenos y otros malos, pero al fin logré comprender que depende de mí hacer que las cosas mejoren, aunque seré franca, puede que mañana piense distinto y quiera renunciar.

No se si será una gran forma de empezar un blog hablando de esto, pero tenía la necesidad de contarlo, y es que la veta cahuinera que habita en mí, quiere saber si hay más personas en el mundo que estén en mi situación.



¡¡Nos Belmont soon!!

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